27 abril 2008

THE LAST WINTER
(REVIEW)
Wendigo(2001)(aquí titulada escalofrío) era una pequeña pelicula de Larry Fesseden que jugaba con el mito indio del demonio del viento. Una personificación del llamado atávico que los bosques profundos y la naturaleza más salvaje provoca en los hombres y un mito que habla de la bestia en la que se puede convertir un ser humano cuando hace caso de dicho llamado.La literatura había tratado este ser en el relato “El wendigo” de Algernon Blackwood, publicado en españa en la antología Los Mitos de Cthulhu y Fesseden tomó partes de la leyenda original para contar una pequeña historia de horror con el espíritu de los bosques de fondo. Con The Last Winter el actor y director retoma su leyenda favorita para personificar en el espíritu del wendigo el conflicto eterno de la naturaleza contra el hombre y la posibilidad de que el final del reinado del homínido sobre la tierra esté más cerca de lo que parece.
La historia se sitúa en el norte de Alaska y en el asentamiento de un grupo de investigadores encargados de estudiar el terreno y hacer la avaluación de impacto de una zona que podría contener un yacimiento. La situación de aislamiento y el entorno helado rápidamente nos llevan al terreno del John Carpenter de La Cosa(The Thing,1982) .La narrativa sobria, el alejamiento espectador-personaje y la atmósfera ciertamente están heredados de aquella obra maestra del horror, pero las coincidencias con ésta acaban ahí mismo, ya que las intenciones de Fesseden no son la de crear un película de terror al uso. The Last Winter transcurre de forma pausada, los acontecimientos con peso son escasos y se desarrollan lentamente a lo largo del minutaje. Poco a poco se va desarrollando una atmósfera de opresión y claustrofobia alrededor de unos personajes enfrentados de forma muy sutil y cuyas motivaciones chocan con el misterio de lo incomprensible. El temor a lo desconocido y su plasmación en fotogramas resulta una muy interesante aproximación a ciertos axiomas Lovecraftianos(Como en La cosa,se podría asociar esta historia con la novela En las montañas de la locura)No solo La visión del Wendigo provoca un temor que acaba desquiciando a los protagonistas, sino que se transmite muy bien la vulnerabilidad del hombre frente al cosmos(aunque en este caso se trate del desconocimiento del poder de la tierra). El gran logro de Larry Fesseden es lograr que desde los primeros minutos se pueda oler el destino final de los protagonistas, que durante sus intentos de adaptarse a las dificultades y situaciones extremas que el argumento va dibujando, el espectador pueda sentir la futilidad de sus actos, lo inútil de sus esfuerzos frente a un final implacable que sin embargo llega de forma imperceptible. Pese a tener momentos escalofriantes, The Last Winter es un relato más cercano al drama ,un acercamiento distinto al cine de género que usa las imágenes con fines más reflexivos. Su trasfondo ecológico no es moralista si no fatalista. El uso de la naturaleza como motor de un cambio irreversible en el camino de la civilización tiene un carácter escalofriante más que aleccionador. En muchos aspectos la película recuerda mucho a La ultima Ola(The Last Wave,1977) y su acercamiento al fantástico de temática ecológica a través de la superstición , compartiendo con ésta su deprimente visión sobre lo irremediable. No parece coincidencia que los acercamientos al fantástico de Peter Weir se asemejen bastante a la personal postura de Fesseden con respecto al género. La mayor virtud del film es su ambigüedad frente al elemento sobrenatural. Los científicos son afectados por el espíritu de la tierra y les hace comportarse de manera extraña. Las teorías científicas sobre la liberación de gas amargo por el deshielo de la capa de permafrost son las razones puramente racionales que podrían explicar el súbito cambio de comportamiento de los miembros del equipo. Sin embargo la intuición de que hay otra cosa, algo desconocido que ha salido de la tierra es una posibilidad más palpable para algunos de los más escépticos miembros de la base. El uso de las huellas como posible presencia de el Wendigo o para mostrar la desaparición de un miembro del equipo son referencias comunes a películas como La noche del demonio(Night of the demon,1957)y como Torneur, aquí el terror es más una presencia posible que un peligro que acosa a los personajes encerrados. Pero en The Last Winter lo que realmente se nos narra es el principio de el fin,lo que viven estos personajes no tiene tanta importancia frente a la verdadera consecuencia final, que no es sino el propio fin de la era humana. Un discurso muy parecido a la próxima The Happening(2008) de M.night Shyamalan ,donde es la tierra la que responde con un mecanismo de autoinmunidad inultentando eliminar al hombre de forma que éste con su tecnología no pueda defenderse ,como forma de buscar un equilibrio. Con un presupuesto muy pobre, este ultimo invierno es un interesante y necesario acercamiento al fantástico ecológico que arroja algo de inteligencia al género del horror, muy falto de este tipo de propuestas en estos días de caos,que es donde deberían reflejarse.

24 abril 2008

SPOOKIES
(REVIEW)
Autentico delirio ochentero dirigido por hasta 3 directores diferentes que resulta ser una joya de la psicotronía chusca de la década del blandiblub.Podría calificarse como joya del cine extravagante, pero no es precisamente un viaje de diversión desprejuiciada.El guión es tan poco coherente que resulta hasta difícil seguir el hilo de una trama tan sencilla como falta de originalidad. Una pena que su ritmo sea tan criminal ,ya que lo tiene todo para llegar a ser una pieza de culto del cine trash. La trama sigue caminos completamente arbitrarios y la narración está al servicio de las espectaculares e incontables apariciones de todo tipo de criaturas: monstruos pringosos, seres tentaculares, mujeres que mutan en arañas, magos malvados ,demonios, muertos vivientes....todo presentado con sabroso latex ,sangre ocasional pero generosa y mucho pringue. La banda sonora se basa en sintetizadores que acompañan a la paleta de colores azulados y oscuros, a la niebla y las lápidas... creando esa irrepetible atmósfera solo encontrable en películas, que como esta, infectaban los videoclubs de la recién estrenada “era VHS”.
La trama de jóvenes encerrados en una mansión para ser cazados uno a uno por todo tipo de criaturas, a cada cual más bizarra e inesperada, está entrelazada con una subtrama en la que un mago quiere hacer resucitar a su amor verdadero y para ello tiene que tomar las almas de esos pimpollos que nunca sabemos por que acaban allí exactamente. Lo divertido es que la historia en el ultimo tercio acaba siguiendo a la joven resucitada y su intento de huir de el señor que le devolvió a la vida contra su voluntad. Su huida de los muertos vivientes es tan ridícula como estimulante a nivel visual. El nivel de delirio iniciado con la absurda inclusión de un niño perdido en su día de cumpleaños( para posteriormente ser enterrado vivo) tiene una alarmante continuidad en las sucesivas apariciones de una especie de sátiro o sirviente demoníaco, que se pasa todo el metraje apareciendo de vez en cuando sin ninguna función concreta más que la solaz del espectador aturdido. La posesión de una de las jóvenes para convertirse en una especie de médium ,que (supuestamente)invoca a los “spookies” para capturar a los incautos personajes, tampoco deja indiferente.
La impresión final es que la película fue rodada sin un guión previo, con un montón de presupuesto para crear efectos especiales y pocas ideas de que hacer exactamente con ellos. El resultado es una melé de intenciones sin rumbo, un ejercicio de amor a el propio acto de crear sin saber hacerlo, que dedica sus esfuerzos a fotocopiar los momentos, dejes y maneras de un tipo de cine hecho en una época concreta .Permanecen todas las manías que conlleva hacer ese esfuerzo sin tener una idea sólida con la que poder empezar. Spookies es el resumen de fondo de catálogo de una revista Fangoria en la década de los ochenta, cuando el maquillaje y el gore ,el encanto del fotograma ,ya era lo único que contaba . Como si uno de los peores monster mash de la decadencia de la universal se tratara, el culto a la figura del monstruo era ya más importante que la historia o el texto. Un festín de idiotez lisérgica e incompetencia fílmica con risas aseguradas que al mismo tiempo fascina con sus imágenes grandgiñolescas y groseras. Spookies es un producto único e irrepetible, lo que no quiere decir que su visión sea fácil. Todo un viaje.

20 abril 2008


LAS RUINAS
(REVIEW)

Basada en una novela Scott smith,La ruinas viene firmada por el mismo escritor de el creador del material base de la película Un plan sencillo. Algo extraño leyendo el argumento de la cinta que nos ocupa, con una tipiquísima estructura de jóvenes turistas acorralados y masacrados por un peligro desconocido. Lejos de huir de la fórmula, Las ruinas sigue casi paso por paso el manual de las películas de género en las que el grupo de chicos y chicas se ven asediados y masacrados en un escenario inhóspito y alejado de la seguridad y las normas de sus civilizados hogares occidentales. No ofrece por tanto ninguna novedad en el discurso de recientes éxitos de torture horror como Hostel, turistas o Wolfcreek. Sin embargo el factor determinante es la presencia de un terror ancestral en forma de hiedras carnívoras, no psicópatas cabreados con la civilización desarrollada con ganas de desmembrar. El mensaje viene a plantear las mismas cuestiones con respecto a la presencia de Norteamérica en los lugares donde no les corresponde, el hombre acomodado rompiendo reglas sagradas y la explotación de la ignorancia geográfica y cultural del adolescente caucásico de buena familia tipo. Las Ruinas peca de una ingenuidad excesiva en el desarrollo de su planteamiento, presentación de personajes y el desarrollo de la historia. Todo está rodado con cierto entusiasmo por el debutante Carton Smith haciendo que la inevitable introducción de la situación no se haga demasiado tediosa u en exceso anodina. Pero al final, lo cierto es que la película no llega a dar un tratamiento completamente novedoso al manido tema, quedándose en un intento loable de ofrecer nuevas perspectivas. Así los guapos jovencitos no son para nada perfectos y su atractivo siempre esta fotografiado de una forma que les muestra vulnerables. Los cuerpos son tersos y atractivos pero nos son mostrados con un ojo mas bien perverso que se recrea en la volatilidad de lo bello. Así, no son baladí las secuencias que muestran a los chicos antes de salir, después de un idílico día de sol playa y alcohol, mostrando sus cuerpos sin glamour o los efectos de una resaca cualquiera con cierto recreo en las imágenes. Esta tónica de contraste progresivo es constante en la película y conforme pasa el metraje el grado de locura va incrementándose llegando a extremos que rayan lo enfermizo.
Una vez se establece la situación central de la película, Los turistas atrapados en unas ruinas mayas acosados por plantas carnívoras, podríamos esperar la típica monster movie donde desaparecen uno por uno. Lo curioso de la situación es que los protagonistas están sitiados por lugareños que no les permiten bajar de la pirámide por miedo a la propagación de la planta, por tanto no tienen escapatoria de las hiedras y su espera es doblemente tensa. Esto crea una cierta inconsistencia argumental que no pasa fácilmente desapercibida .Dada la movilidad y poder de las plantas, uno se pregunta por que no se los come a todos directamente desde el principio. Pero olvidando lo que podría ser y no es, En las ruinas la atracción principal acaban siendo los efectos de las plantas en la anatomía humana y como reaccionan estos ante ellos. Imágenes perturbadoras, con dejes cronembergianos y puntuales momentos de gore clínico y salvaje que van sucediéndose conforme las relaciones entre los personajes se endurecen y se va creando una insana atmósfera de decadencia. La historia podría ser una variación extendida de la historieta “la balsa” de Stephen King ( el primero de los capítulos de Creepshow 2) y tiene muchos puntos en común con la opera prima de Eli Roth Cabin Fever.Lo cierto es que es una correcta cinta de terror que logra incomodar sin recurrir a los sustos manidos de otras monster movies. La mayoría del horror sucede a plena luz del día y sin golpes de sonido bruscos o movimientos de cámara mareantes. El miedo es a tiempo real y no hay elipsis cuando uno de los personajes sufre. En el fondo, no es si no un reflejo de la corriente de cine tortura aún vigente pese a tener la presentación de cine con criatura. Pese a todo,sin ofrecer nada original ,Las Ruinas es una excelente muestra de género con alguna que otra imagen sorprendente que mantiene un pulso narrativo suficientemente atractivo como para dejarla escapar.